Acciones dirigidas a fomentar las posibilidades del alumnado de afrontar el futuro con optimismo

Este indicador pretende mostrar en qué medida el centro educativo se propone y aplica acciones para conocer la percepción que los alumnos tienen de su futuro y visualizarlo con optimismo. Los alumnos de secundaria tienen la necesidad de identificar su futuro como un valor seguro y de hacerle frente con optimismo. Habría que saber en qué medida el conjunto de la comunidad educativa trabaja para que el alumnado perciba su futuro como un espacio de seguridad, éxito y lleno de expectativas ilusionantes. Martin Seligman, psicólogo de la Universidad de Pensilvania, considera que el optimismo de una persona está muy relacionado con la responsabilidad que asume sobre lo que le sucede y, por tanto, se cuestiona qué es lo que puede hacer para rectificar, mejorar o cambiar una determinada situación.
  • Elaboración de un plan de comunicación en el que se aborden la modificación del lenguaje, los mensajes positivos y la orientación de determinadas actividades enfocadas hacia una visión más positiva y optimista, un plan que desarrolle las acciones concretas que se deben seguir, adaptado al centro educativo y con los protocolos de intervención desarrollados.
  • Promover la positividad como factor de protección y mantenimiento de una adecuada salud mental y realizar acciones que permitan a los estudiantes aprender a disfrutar del día a día y de lo que les rodea.
  • Trabajo de los miedos hacia el futuro: Acciones en el aula en las que se compartan los miedos que genera el futuro y se cree un clima íntimo de aceptación y afrontamiento.
  • Debates entre el profesorado: Sería interesante que los profesores se pregunten y debatan sobre cómo pueden favorecer que los alumnos entiendan el futuro como un espacio de seguridad, éxito y lleno de expectativas optimistas y positivas.